El vehículo tendrá tres hileras de asientos y, al menos en principio, se comercializaría solo en Estados Unidos.
Toyota está inyectando 1.300 millones de dólares en su fábrica de Kentucky para “futuros esfuerzos de electrificación”, incluida la producción de un SUV eléctrico de tres filas de asientos para el mercado estadounidense. La noticia es un poco sorprendente, ya que el mayor fabricante de automóviles del mundo es también uno de los más opuestos a que la industria automotriz se convierta en cien por ciento eléctrica.
La firma nipona dice que costeará una línea de ensamblaje de vehículos eléctricos en su planta de Kentucky, así como el ensamblaje de paquetes de baterías con baterías para vehículos eléctricos suministradas por sus instalaciones en Carolina del Norte. La compañía adelantó que invertirá un total de 17 mil millones de dólares en sus operaciones en Estados Unidos para respaldar el cambio a los vehículos eléctricos, según informa The Verge.
Este cambio de postura podría contribuir a una reconciliación entre Toyota y los ambientalistas, que miraban con malos ojos al fabricante por sus permanentes reticencias y vacilaciones a la hora de incursionar en el mercado eléctrico.
La compañía se opuso a los esfuerzos de Estados Unidos para reducir los contaminantes del aire y las emisiones de gases de efecto invernadero, impulsando políticas que priorizaran los híbridos sobre los vehículos eléctricos de batería. Respaldó la demanda de la administración Trump contra las estrictas normas de emisiones de California.
Toyota fue uno de los pioneros en electrificación con el muy popular Prius, que ayudó a allanar el camino para empresas como Tesla y otras al demostrar que los vehículos con sistemas de propulsión alternativos podían ser grandes vendedores. Pero desde entonces la empresa se ha quedado muy por detrás de sus competidores. Solo vende dos vehículos eléctricos de batería en EE. UU.: el Toyota bz4X y el Lexus RZ 450e.
El reciente debate sobre la demanda de vehículos eléctricos en Estados Unidos le ha dado a Toyota la oportunidad de alardear de su estrategia de priorizar los híbridos sobre los vehículos puramente eléctricos de batería. «La gente finalmente está viendo la realidad», dijo recientemente el presidente y exdirector ejecutivo de Toyota, Akio Toyoda, a los periodistas en el Japan Mobility Show, según The Wall Street Journal.
«Hay muchas maneras de escalar la montaña que es lograr la neutralidad de carbono», aseguró.